Una ecuación química describe una reacción química e indica cómo se combinan las sustancias elementales y compuestas para formar nuevas sustancias. Por ejemplo, la ecuación química que representa la reacción de combustión del metano con el oxígeno es:
En las ecuaciones químicas siempre se usa una flecha que indica el antes y el después. A la izquierda de esa flecha se escriben los símbolos o fórmulas de los reactivos que se tienen antes de la reacción y a la derecha, los de los productos que se forman una vez que ésta se lleva a cabo.
El signo matemático + se emplea para separar cada una de las sustancias que se encuentran en un mismo lado de la ecuación (reactivos o productos).
Junto a cada fórmula se escribe entre paréntesis el estado de agregación de la sustancia; es decir, si es sólida (s), líquida (l), gaseosa (g) o se encuentra en disolución acuosa (ac); es decir, disuelta en agua.
Los coeficientes que se escriben antes de cada reactivo indican la cantidad relativa de las sustancias que reaccionan y de los productos que se obtienen.